Alergias alimentarias: causas, síntomas y cómo manejarlas
Si eres de los que se la pasa con rashes o urticaria, rinitis, picor en los ojos o cualquier reacción cutánea y ya has hecho pruebas cutáneas para evaluar ese alérgeno que te detona, o te la pasas tomando antihistamínicos porque ya sabes que tienes un tema de histaminas, ¡este artículo es para ti!
¿Qué es una alergia alimentaria?
Una alergia alimentaria es una reacción adversa que ocurre casi inmediatamente —en menos de dos horas— al consumir un alimento enemigo. Esta reacción es mediada por tu sistema inmunitario, específicamente por la inmunoglobulina IgE.
Tu sistema inmunológico reacciona ante sustancias extrañas. Incluso, puede llegar a haber reactividad cruzada por otra que tenga péptidos o fragmentos de proteína similar al enemigo en cuestión.
Las alergias alimentarias suelen confundirse con las intolerancias alimentarias. Sin embargo, las intolerancias alimentarias no ocurren por una reacción inmunológica, sino que se producen cuando el cuerpo no puede digerir o metabolizar adecuadamente un alimento.
¿Cuáles son los síntomas de las alergias alimentarias?
Los síntomas de alergias alimentarias pueden ser cutáneos, respiratorios o gastrointestinales. Generalmente, se manifiestan a los pocos minutos o hasta dos horas después de ingerir el alimento. En algunas personas pueden ser leves y en otras pueden llegar a poner en riesgo su vida. Algunos de estos signos son:
- Eccema, picazón (prurito), ronchas, dermatitis atópica o enrojecimiento de la piel
- Tos, estornudos, picor en la garganta, sibilancias, congestión nasal, problemas para tragar o en las vías respiratorias
- Dolor abdominal, náuseas, vómitos, cólicos o calambres, diarrea, hinchazón abdominal
- Mareos
- Inflamación de los labios, la lengua, la cara u otras partes del cuerpo.
- Falta de aliento
- Reacción anafiláctica o anafilaxia (en casos de reacciones alérgicas graves)
¿Cuáles son las causas de una alergia alimentaria?
Las alergias alimentarias son el resultado de la combinación de varios factores, entre ellos (según Sicherer SH y cols., 2020):
Predisposición genética
Existe una mayor probabilidad de desarrollar alergias alimentarias si hay antecedentes familiares de alergias, como asma, rinitis alérgica o eccema.
Exposición en los primeros años de edad
La introducción de alimentos sólidos antes de los 4-6 meses de edad puede aumentar el riesgo de desarrollar alergias alimentarias. Hay un gran listado de alimentos que se sugiere evitar durante el primer año de vida (como la leche de vaca, los huevos, el trigo, los pescados o el maní). Es importante seguir las pautas de alimentación complementaria establecidas por los pediatras.
Factores ambientales
La exposición a ciertos alérgenos ambientales, como el polen o el polvo, puede aumentar la susceptibilidad a las alergias alimentarias.
Alteración del tracto gastrointestinal
¿Sabías que 70 % de tu sistema inmune se aloja en tu intestino? Las alteraciones en la barrera intestinal pueden permitir que las proteínas alimentarias atraviesen la mucosa intestinal y desencadenen una respuesta inmunitaria.
¿Cuáles son los alimentos que pueden causar reacciones alérgicas?
Cualquier alimento puede causar una alergia, pero determinados alimentos son frecuentemente más asociados con reacciones alérgicas. Algunos de ellos son:
- Trigo, cebada y centeno
- Maní o cacahuete
- Mariscos y crustáceos
- Leche de vaca
- Huevo
- Frutos secos como las avellanas, las almendras, las nueces, los pistachos o los anacardos.
- Sésamo
¿Cómo se diagnostica la alergia alimentaria?
El diagnóstico de una alergia alimentaria generalmente implica una combinación de evaluación clínica y análisis de sangre venosa o de sangre capilar en la que se evalúe IgE ante alimentos.
A continuación, te explicamos los métodos más comunes de diagnóstico:
- Historia clínica: El médico, generalmente alergólogo, recopila información detallada sobre tus síntomas:
- ¿Cuándo aparecen?
- ¿Cuánto duran?
- ¿Aparecen después de ingerir algún alimento?
- ¿Hay antecedentes en tu familia?
- Pruebas cutáneas: Las pruebas cutáneas, también conocidas como pruebas de punción o prick test, implican la aplicación de extractos alimentarios en la piel, generalmente en el antebrazo.
Si eres alérgico a alguno de los alimentos, es probable que se forme una pequeña protuberancia roja en la zona, lo cual indica una reacción alérgica.
- Análisis de sangre: Los análisis de sangre pueden medir los niveles de inmunoglobulina E (IgE) específica para alimentos. Un aumento en los niveles de IgE específica para un alimento en particular puede indicar una posible alergia a ese alimento.
- Pruebas de eliminación y reintroducción: En esta prueba, se elimina el alimento sospechoso de la dieta durante un período de tiempo determinado para observar si los síntomas mejoran. Luego, se reintroduce el alimento de forma controlada bajo supervisión médica para ver si se desencadena una reacción alérgica.
En los últimos años, las enfermedades alérgicas asociadas con alimentos han incrementado. Se estima que, en Estados Unidos, 8% de niños y hasta 2% de los adultos padecen algún tipo de alergia alimentaria.
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¿Cuál es el tratamiento de las alergias alimentarias?
El tratamiento de las alergias alimentarias consiste principalmente en evitar el alimento desencadenante de la reacción alérgica. Por eso, es muy importante que puedas leer las etiquetas de los alimentos empacados que consumes.
En este video te contamos cómo hacerlo, para que puedas tener las herramientas y cuidarte de estos ingredientes o de algún potencial alérgeno alimentario para ti, como algún aditivo alimentario que también pueda ser detonante de reacciones alérgicas o de activación de mastocitos.
Otras medidas comunes incluyen:
- Medicamentos antihistamínicos: los antihistamínicos pueden aliviar los síntomas leves a moderados de una reacción alérgica, como picazón, urticaria o congestión nasal. Sin embargo, es importante que puedas Remover la raíz por la cual estás acumulando histaminas.
- Inmunoterapia: en algunos casos, los médicos recomiendan la inmunoterapia oral o subcutánea, que consiste en la exposición gradual y controlada al alérgeno alimentario para desarrollar tolerancia a largo plazo. Sin embargo, este enfoque todavía está en etapas de investigación y solo está disponible para ciertos alérgenos alimentarios.
- Medicamentos inyectables: en casos graves, como shocks anafilácticos, es importante contar con un plan de emergencia. Para este plan, puede ser necesario el uso de una epinefrina autoinyectable (EpiPen), saber cómo y cuándo administrarla.
- Asesoramiento nutricional: la orientación de nutricionista es sumamente útil para asegurarse de llevar una alimentación equilibrada, adecuada en nutrientes y adaptada a tus necesidades, gustos y alergias.
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REFERENCIAS:
- Sicherer SH, Warren CM, Dant C, Gupta RS, Nadeau KC. Food Allergy from Infancy Through Adulthood. J Allergy Clin Immunol Pract. 2020 Jun;8(6):1854-1864. doi: 10.1016/j.jaip.2020.02.010. PMID: 32499034; PMCID: PMC7899184.
- Alletess Medical Laboratory
